Propatto se tomaba el trabajo de ojear a jóvenes promesas de barrios pobres, y de aquella tarde, se llevó a Tévez y a Darío «Cabañas» Coronel. A los 7 meses de edad, Tévez sufrió quemaduras de tercer grado tras caer accidentalmente agua hirviendo sobre él. El 20 de abril de 2016, marcó dos goles al Deportivo Cali en una victoria por 6 a 2 para permitir avanzar a Boca a octavos de final de la Copa Libertadores como invicto.