¿ O es un monstruo de verdad, el miedo que se queda escondido en su propia caja de miedos? De ahí la idea de un personaje que surgen de distintos universos paralelos, alternativas seleccionadas en momentos concretos. Finalmente, uno se da cuenta que no podemos proteger a nuestros hijos del universo, que, en realidad, son ellos los que nos protegen del abismo con sus abrazos, con los días que, agotados, nos quedamos dormidos junto a ellos cuando tratamos de que se duerman.